De la ruta de la seda a blockchain: joint venture para mejorar el comercio internacional
[Artículo original publicado el 27 de enero de 2018 en Criptonoticias]
El comercio global ha ido evolucionando de manera exponencial desde la famosa Ruta de la Seda en el siglo I a.C., que cruzaba todo el continente asiático, Europa y África. Hoy, llegamos a una nueva revolución que volverá a mejorar esta industria: blockchain. Así lo explica en este artículo Jaime Berrocal, experto en Blockchain de IBM España.
Narran los historiadores que allá por el siglo I a. C. comenzó a darse forma a la Ruta de la Seda de manera organizada. Su intención era dar soporte a la gestión del tráfico de mercancías desde el Lejano Oriente hasta África y Europa. Quién le iba a decir a aquellos precursores que, 22 siglos después, una cosa llamada “blockchain” iba a suponer otra revolución en el comercio internacional. Veamos un ejemplo.
Kenia, como gran productor y exportador de flores, lleva invirtiendo en aumentar su cuota de mercado en este comercio mundial durante la última década. Su gran reto, al día de hoy, es que el coste de la gestión de un envío de Mombasa a Madrid puede ser superior al coste del transporte en sí mismo. Gestionar los formularios y registros de transporte de forma digital en blockchain, puede reducir significativamente estos costes de gestión y facilitar la expansión de su mercado. Y es que aunque el uso de blockchain más conocido popularmente sean las criptomonedas, la aplicación de esta tecnología está suponiendo una revolución en un extenso ámbito de dominios.
Durante 2018 hablaremos de cómo blockchain es la tecnología que está permitiendo transformar procesos críticos del negocio de las empresas (ditribuidores de alimentación, gobiernos o bancos), mientras los líderes empresariales ven como extraer valor de los métodos seguros de transferencia de activos, registros permanentes y permisionados, y la posibilidad de operar en redes de colaboración fiables.
En este sentido, IBM acaba de anunciar la intención de crear una joint venture con Maersk, compañía líder en transporte y logística, que aportará beneficios a los participantes de la cadena de transporte y suministro como fabricantes, navieras, operadores de tránsito, operadores de puertos y terminales, transportistas y aduanas. Lo haremos mediante la comercialización de una plataforma de digitalización del comercio mundial abierta y desarrollada conjuntamente, que proporcionará más transparencia y simplicidad en el movimiento de productos a través de las fronteras y las zonas comerciales.
La trascendencia de esta iniciativa se ve reflejada en cifras. El comercio representa en torno al 60% del PIB mundial, y todavía su gestión se basa fundamentalmente en complejos expedientes en papel. Una muestra: Maersk reveló que durante el tránsito desde el este de África a Europa, un solo envío de productos tuvo más de 200 interacciones con 30 individuos y organizaciones, generando una pila de 10 centímetros de registros en papel.
Todo comenzó en marzo de 2017, cuando Maersk e IBM se preguntaron cómo podrían hacer más sencillo el comercio internacional. Como respuesta a este reto, se empezó a trabajar en un piloto que demostró ser prometedor particularmente en la aplicación blockchain para mejorar la visibilidad de principio a fin de la cadena de suministro, así como la digitalización securizada, automatización y almacenamiento de los expedientes en papel. Pronto se vio como el coste del manejo del papel, que podía llegar a suponer hasta un 15% del valor de las mercancías, podía ser reducido significativamente usando blockchain.
Combinando además blockchain con la utilización del Internet de las Cosas (IoT) es posible obtener mejoras adicionales en el proceso de transporte. El geoposicionamiento de lotes de mercancías o contenedores permite tener visibilidad del trasporte en tiempo real y, por tanto, optimizar el resto de la cadena y automatizar etapas del proceso. La sensorización también permite monitorizar las condiciones del trasporte (temperaturas, vibraciones, apertura de puertas del contenedor, etc.) y, por tanto, trazar posibles incidencias o deterioros.
El objetivo de esta joint venture es crear un ecosistema abierto al que puedan unirse empresas que formen parte de la cadena de valor del trasporte y se sumen a compañías que ya han mostrado su interés, como General Motors, Procter and Gamble, Agility Logistics, Aduanas de Singapur, APM Terminals o PSA International, entre otras. Supone un paso significativo en la adopción de blockchain y ayudará a agilizar y eliminar fricciones en el comercio global.
La nueva ruta de la seda se apoya en blockchain y pronto será una realidad.